Sharp

Estar rodeado de tantos objetos con filo debería ser peligroso para mí, especialmente debido a todas las veces que he repetido "Verónica" tres veces frente a un espejo y no me ha pasado nada, pero no lo es. O tal vez me proteja el hecho de que tenga una prima que se llama así, quien, por cierto, me regaló, junto a su enamorado, un pie de limón buenazo. Pero se lleva el premio Paulina que me regaló un tres leches ÉPICO que ella misma hizo.

Todo ese metal me está pesando por adentro, pero cuando me bañe se va a oxidar... ¿Eso cambia algo?

Regresando a los objetos con filo, ahora solo se ven graciosos para mí; me gustan más las cosas de plástico, aunque mi celular es de ambos materiales. De hecho, mis cosas más importantes son de uno o de ambos materiales. Y de tela. La ropa es importante. Y de papel. Mi cuaderno es importante, aunque puedo escribir en la computadora.

ODIO cuando gritan. Se desesperan y emocionan por un ser humano, un igual. Ves personas todos los días, ¿por qué no gritas ahí? Ahora, si gritaran por su música, por su actuación, hasta por su gusto para vestirse, sería diferente. Un momento, ¿tengo un punto? No, de hecho, estaba a punto de contradecirme, pues es obvio que no le gritan a alguien por ser humano, sino por lo que sea especial que tiene.

PS: Lee www.cracked.com es divertidísimo y aprendes cosas que ni tu papá leyendo el periódico todos los días sabría.